Desde Moody’s Investors Service, uno de los negocios de calificación crediticia de bonos más reputados del mundo, han señalado que la calificación crediticia para El Salvador podría volverse más sombría como consecuencia de la apuesta del país por el Bitcoin.
A través del analista de Moody’s Jaime Reusche, se confirmó que las calificaciones de emisor de largo plazo para El Salvador se sitúan ahora en Caa1, lo cual significa que las emisiones con esa nota son «especulativas, con mala reputación, y que están sujetas a un riesgo crediticio muy alto». Moody’s también cambió la perspectiva del país a una negativa.
El gobierno del país, encabezado por el presidente Nayib Bukele, ha tenido problemas de liquidez en el pasado, lo que hace que el comercio de Bitcoin sea en estos momentos bastante riesgoso, y El Salvador tiene actualmente alrededor de 1.391 bitcoins en sus arcas.
Según un análisis de Bloomberg, y de acuerdo con Reusche, «si sube mucho, entonces eso representa un riesgo aún mayor para la capacidad de pago y el perfil fiscal del emisor». En noviembre pasado El Salvador lanzó un bono Bitcoin a 10 años por valor de mil millones de dólares a través de Blockstream.
Esos bonos criptográficos podrían ayudar al país a pagar su deuda, pero a menos que los bonos de Bitcoin sean muy bien recibidos por los inversores, existe la probabilidad de que sea necesario reestructurar los bonos de mercado tradicionales, ya que la deuda aumenta, sobre todo como consecuencia de la reciente caída en el valor de la criptodivisa.
Las razones por las que la calificación de El Salvador ha caído
Además de los riesgos ya de por sí intrínsecos que supone una apuesta por el Bitcoin, hay otros elementos que contribuyen a la baja en la calificación de El Salvador. Uno de ellos es que el Fondo Monetario Internacional (FMI) considera que las condiciones de financiamiento permanecerán aún muy ajustadas tanto en el mercado interno, como en el externo, para este año e incluso para el próximo.
Esta semana, el Fondo también ha instado a que el Gobierno elimine el Bitcoin como moneda de curso legal en el país, algo que ha aumentado la tensión en las relaciones entre el organismo y el Ejecutivo de Bukele.
Tanto la Ley de Bitcoin, como otras medidas tomadas por el gobierno de Bukele, reflejan a ojos de los expertos una gobernanza debilitada en El Salvador. Por si fuera poco, el presidente ha tensado la relación con sus socios internacionales, en especial con Estados Unidos, además de que ha puesto en riesgo el progreso hacia un acuerdo de largo plazo con el FMI.
Cómo es afectado El Salvador por esta calificación
Una calificación crediticia soberana como las que elabora Moody’s es básicamente una evaluación independiente de la solvencia de un país para hacer frente a sus deudas. Las calificaciones crediticias pueden brindar a los inversores información sobre el nivel de riesgo asociado con la inversión en la deuda de un país en particular, incluido cualquier riesgo político.
Si la calificación baja para El Salvador, eso significa que tanto la inversión extranjera directa, como la financiación, podrían descender considerablemente, ya que los inversores utilizan las calificaciones crediticias como una forma muy fiable de evaluar el riesgo de los bonos de un país en particular. Y en este caso los bonos Bitcoin vinculados a dinero público son una apuesta muy riesgosa.
La obtención de una buena calificación crediticia soberana suele ser esencial para los países en desarrollo que desean acceder a la financiación en los mercados internacionales de bonos. Por ahora, El Salvador ha disminuido virtualmente sus posibilidades de obtener precisamente esa valiosa financiación.
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