Inicio Destacados Dionisio Gutiérrez «Para lograr el éxito, hay que pasar un número suficiente...

Dionisio Gutiérrez «Para lograr el éxito, hay que pasar un número suficiente de fracasos»

Dionisio Gutiérrez Entrevista 2022 Pulso Capital

¿En qué realmente vale la pena invertir? ¿Qué hábito puede mejorar la vida de alguien que ya ha tenido una trayectoria de triunfos? ¿Qué rol juegan los fracasos en la búsqueda del éxito? En este diálogo exclusivo con Pulso Capital, el líder y empresario Dionisio Gutiérrez, Presidente de la Fundación Libertad y Desarrollo, lo comparte.

Pulso Capital: ¿Cuál es el libro o los dos o tres libros que más impacto han generado en su vida?

Libros que han influido en mi vida han sido muchos, sin embargo, de gran impacto he encontrado dos que han sido de cabecera desde hace muchos años, En Defensa de la Felicidad, de Matthieu Ricard, un monje budista, brazo derecho del Dalai Lama en Europa. Y el otro es Florecer, de Martin Seligman, el padre de la psicología positiva.

Considero que el conocimiento, la historia, la filosofía, son importantísimos, pero el acceso al tipo de conocimiento que te dan personajes como Ricard o Seligman, te ofrecen una posibilidad de crecimiento personal extraordinario, te hacen entrar en una realidad de lo que somos como especie y el potencial que tenemos.

Y luego el libro que más he regalado, es otro en la línea de este grupo, que se llama “Libérese del Dolor de Espalda” que tiene un título que considero bastante fuera de contexto, un libro de John Sarno, ya que realmente lo que ofrece es la medicina para curar todos nuestros dolores, hasta el dolor del corazón. Porque nos enseña los síntomas de los malestares que nos afectan y explica la medicina más importante y el instrumento más valioso que tenemos en el cuerpo humano para lidiar con todos estos males, que es la respiración. Eso es lo que nos enseña, a respirar.

¿Qué compra de 100 dólares o menos ha influido más positivamente en su vida en los últimos 6 meses?

En los últimos veinte años ha sido una colección de libros, que todos juntos cuestan menos de cien dólares, son ocho publicaciones que pertenecen a un equipo de científicos, entre los que están un biólogo celular, un psiquiatra, dos cirujanos, un doctor, un naturista, un monje budista y un filósofo.

Esa colección de libros de este grupo de científicos presenta en su conjunto, un modelo de salud integral para el siglo 21. Es el mejor regalo que uno puede dar a un amigo.

Me he gastado esos cien dólares muchas veces, y cada vez que lo hago me da una alegría extraordinaria porque quienes sepan apreciar los tesoros que son estos libros de este grupo élite, probablemente verán que es el conocimiento más importante a través del cual uno puede alcanzar niveles extraordinarios de satisfacción y bienestar integral.

¿Cómo le ha ayudado un fracaso, o lo que le pareció un fracaso, a triunfar después?

Los fracasos en la vida le enseñan a uno la humildad, por un lado, y por otro, a apreciar los éxitos, los logros y los avances.

Creo que unos no se podrían saborear si no existieran los otros. Es más, para lograr el éxito y los logros importantes, hay que pasar por un número suficiente de fracasos.

Si – dicho metafóricamente – pudiera poner un enorme cartel en algún sitio, es decir, si pudiera enviar un mensaje a millones o miles de millones de personas ¿qué diría en ese cartel y por qué?

Probablemente sería “la victoria más difícil, es la victoria sobre uno mismo”. Eso no lo digo yo, lo dijo Aristóteles y creo que sigue siendo la clave para que la especie humana continue luchando por evolucionar hasta que llegue a un punto donde nos demos cuenta de que, si cada uno de nosotros podemos superar lo negativo, los malos sentimientos, las malas emociones, las cosas malas que somos capaces de hacer… aprenderemos a tener la victoria sobre nosotros mismos.

Es lo que yo pondría sobre un cartel y que la gente lo analice.

Además, es una frase que hace pensar a las personas. ¿Qué quiere decir? Superar las limitaciones que como especie humana, tenemos en nuestra naturaleza.

¿Cuál ha sido la mejor inversión o la más rentable que ha hecho en su vida?

La educación, sin duda alguna.

La formación y mi colección de libros, que van muy de la mano.

¿Tiene alguna idea de cuántos posee?

Tal vez entre 7000 a 8000 entre todas mis bibliotecas.

¿Y en cuanto a la lectura? ¿Alguno que no le haya gustado o leído?

Sí, muchos, pero me cuesta deshacerme de ellos.

Algo tiene cada libro.

¿Qué costumbre rara tiene o qué cosa absurda le gusta?

La soledad.

Estar sólo, en contacto con la naturaleza o con mis mascotas.

Al mismo tiempo, me gusta ser sociable y estar con mis amigos, pero disfruto de la soledad.

¿Se considera introvertido o extrovertido?

Depende. Soy selectivo.

Adaptativo ¿o algo así?

Introvertido no.

Creo que parte del desarrollo humano, incluye el saber adaptarse a las circunstancias. Puedo ser muy incisivo o puedo ser un luchador con mucha potencia. Siempre soy claro, siempre doy la cara y digo lo que pienso.

En los últimos 5 años ¿qué nueva creencia, comportamiento o hábito ha mejorado más su vida?

Diría que llegar a los sesenta. Yo pensaba que uno a esta edad se convertía en algo viejo, de la tercera edad, con poco tiempo en el inventario.

Sin embargo, he ido descubriendo que los sesenta y setenta pueden ser una edad correcta y plena de la vida. Porque es cuando uno capitaliza la experiencia, la educación y se abren otras puertas del sistema de la mente y del corazón, para nuevos aprendizajes.

¿Qué consejo le daría a un estudiante universitario inteligente y motivado que fuera a salir al “mundo real” y qué le aconsejaría no hacer?

Aconsejaría no caer en la trampa de trabajar poco, querer ganar mucho y pretender que las cosas sean gratis. El mundo de hoy necesita algunas lecciones en ese campo.

La superación, el éxito y los logros requieren enormes sacrificios y las generaciones jóvenes de hoy están un poco perdidas en el espacio. Hay que regresar a los valores básicos.

¿Qué malas recomendaciones oye en su profesión o especialidad?

¿Malas recomendaciones? Ninguna.

¿A qué ha aprendido a decir no?

Decir no, no es fácil. Hay gente a la que se le hace más sencillo, pero a mí me costó aprenderlo.

Ahora ya tengo un buen número de años de haberlo aprendido y ya sé decir no a lo que no quiero o no me gusta, especialmente en el uso de mi tiempo.

Cuándo se siente agobiado o no se concentra ¿qué hace? ¿Qué preguntas se plantea?

Más que hacer preguntas me encuentro conmigo mismo a través de la meditación. Desde la enseñanza budista de la meditación que es muy básica y simple.

Poner la mente en la medida de lo posible, en silencio. Allí es donde uno encuentra las respuestas a los momentos más difíciles de la vida.

¿Es fácil lograrlo?

Solo se llega intentándolo.

Salir de la versión móvil