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Importancia de Izabal en el turismo en Guatemala

El turismo en Guatemala es un motor de desarrollo económico y constituye la segunda
actividad principal generadora de divisas. Entre sus principales atractivos turísticos se
encuentra el departamento de Izabal, ubicado en el nororiente del país, en la costa atlántica.

De acuerdo con el Instituto Guatemalteco de Turismo (INGUAT), encabezando la lista de
segmentos turísticos en los que el país tiene potencial se encuentra la cultura, la naturaleza
y la aventura. El departamento de Izabal satisface estos tres puntos con amplitud, allí se
encuentra una alta diversidad biológica y cultural, abundan sitios naturales e históricos, que permiten a los turistas experimentar no solo el lugar, sino además el contacto con diversas culturas.

Por ejemplo, entre los atractivos jerarquía 5 (que son los que presentan rasgos
excepcionales de interés y valor mundial), se encuentra el Parque Nacional Río Dulce.
Además, entre los atractivos de jerarquía 4 (aquellos con características singulares y
representativos para la región de Centroamérica y visitantes nacionales) se encuentra el
lago de Izabal, Castillo de San Felipe de Lara y Livingston.

 

Atractivos culturales en Izabal

Izabal ofrece un enclave de tres culturas principalmente: garífuna, q’eqchi y mestiza. De
hecho, el municipio de Livingston es la casa de la lengua, la danza y la música garífuna,
declarado como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

La cultura garífuna tiene un origen mixto, en el que se funden elementos culturales de
grupos indígenas caribeños y afrodescendientes. Su idioma pertenece al grupo de las
lenguas arahuacas, sumamente rico en cuentos y cantos que funcionan como depósitos de
la historia y conocimientos tradicionales.

En Izabal también se encuentra el Parque Arqueológico y Ruinas de Quiriguá, un sitio
arqueológico a orillas del río Motagua, en el municipio de Los Amates, declarado Patrimonio
de la Humanidad, también por la Unesco.

 

Turismo de naturaleza y aventura

El atractivo natural de Guatemala es indiscutible, gracias a su clima (que promedia 20
grados centígrados la mayor parte del año) es llamado el país de la Eterna Primavera y es
uno de los 19 países megadiversos en el mundo (INGUAT, 2015).

A nivel nacional hay 309 áreas protegidas, esto corresponde al 31% de la extensión
territorial. Entre las que se ubican en Izabal se encuentra el Parque Nacional Río Dulce, el
Parque Nacional Cuevas del Silvino, la Reserva de la Biosfera Sierra de las Minas y la
Reserva Natural Cerro San Gil, entre muchos otros.

La conexión del lago de Izabal y Río Dulce es uno de los corredores biológicos más
relevantes de la región centroamericana, un hábitat importante para la conservación del
manatí antillano.

Además en Izabal se encuentran los puertos marítimos Puerto Barrios y Santo Tomás de
Castilla, este último, además de ser un importante centro de intercambio internacional,
también, es el lugar en el que durante los meses de octubre a mayo atracan los cruceros
caribeños que llegan al país.

Al mismo tiempo, de las 18 marinas turísticas registradas en Guatemala, 17 se encuentran
en Izabal. Las embarcaciones llegan principalmente de mayo a octubre, algunas de ellas
para resguardarse durante la temporada de huracanes en el Caribe (Izabal ofrece una
barrera natural para ello).

 

La caída del turismo llama al altruismo

El turismo es uno de los sectores más afectados en el mundo con la pandemia del covid-19,
Guatemala no es la excepción, de hecho, se estima que el 82% de las empresas turísticas
tuvieron que reducir o cesar completamente sus actividades.

Si bien el Inguat ya está buscando salidas para la reactivación del sector a nivel nacional,
escogiendo a Izabal y Antigua Guatemala como sus cartas fuertes, la región caribeña del
país continúa profundamente afectada, porque además de la pandemia, durante 2020 la
tormenta Eta golpeó con fuerza el departamento.

De esta cuenta, el sector privado y la sociedad civil han unido esfuerzos para en alguna
medida aliviar a la población mientras el turismo se reactiva.

Trecsa destinó un presupuesto de Q150,000.00 a la compra de víveres y artículos de
higiene y/o protección, que fueron repartidos entre las comunidades dentro del área de
influencia de sus diferentes proyectos, entre las que se encuentra el departamento de
Izabal.

Por su parte, Walmart de México y Centroamérica donó cerca de mil kilos de productos de
primera necesidad, que se repartieron en los albergues en donde se ubicaban los
damnificados de Eta.

La Cervecería Centroamericana donó más de 22 500 tiempos de comida, mientras que la
Fundación Isabel Gutiérrez de Bosch y el Comité de Emergencia Rotario donaron
materiales de protección e higiene, víveres y colchones, al tiempo que facilitaron un puente
aéreo para el transporte de las donaciones.

Durante Semana Santa de 2021 se incrementó la movilidad de turismo en Izabal hasta en
un 40%, en donde se contabilizaron más de 144 000 turistas, aunque aún no han logrado
los niveles previos a la pandemia.

Mientras el Inguat continúa promoviendo la región con la campaña Izabal, un caribe verde,
su director, Mynor Cordón, cree que la recuperación de visitantes internacionales ocurrirá a
largo plazo, empezando con un repunte del turismo local en el mediano plazo.

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