Tabla de Contenidos
Su nombre en quechua es Nina que significa fuego, y según su CEO, Andrés Novillo, se inspiraron en sus raíces para darle el nombre a esta Startup de origen ecuatoriano, la cual se dedica a la transformación de residuos agroindustriales en productos sostenibles en América Latina.
Nina Energy recientemente fue seleccionada en el programa de la aceleradora Acelera Latam denominado Geodesic, por su destacado compromiso con la innovación en el sector de la energía limpia y la creación de tecnología para transformar biomasa residual en biocarbono de la atmósfera.
La startup es liderada por Novillo, quien se autodescribe como un hombre persistente, ya que la startup ha logrado que varias aceleradoras los han elegido para aportar capital, formación y conocimiento.
Desde 2016 se involucró en el sector de emprendimiento de base tecnológica. Pero no fue hasta el 2021 que logró hacer sinergia con un antiguo amigo de la universidad, unieron sus conocimientos y formaron lo que ahora es una Startup que forma parte del sector Climatech. Mario Heredia pone toda la tecnología, la parte técnica y científica, y Andrés Novillo toda la parte de las operaciones, el financiamiento y la parte comercial.
¿Qué hace diferente a Nina Energy de las demás startups?
Nos gusta decir y recalcar que somos una startup de base científica, todo lo que hacemos es resultado de un estudio doctoral del otro co fundador, Mario Heredia, él en su estudio idealizó e imaginó esto que hacemos. Tecnología para transformar biomasa residual en biocarbono, y con esto nosotros lo que estamos haciendo, es capturando, removiendo y capturando carbono CO2 de la atmósfera.
Lo que nos hace diferentes, es que sabemos que se puede hacer tecnología de alta calidad en Sudamérica, y que esta no es únicamente asequible para países europeos y norteamericanos. Esta tecnología puede tener tanto en precio, como en calidad, una accesibilidad para todo Sudamérica y una parte de África.
Acelera Latam creó el programa Geodesic para apoyar a startups en etapa pre-semilla en América Latina, y ustedes fueron seleccionados ¿cómo fue el proceso para que esta aceleradora invirtiera capital en ustedes?
Costó, porque fue la tercera vez que yo intentaba ingresar al programa hasta que nos aceptaron. Las otras veces nos hacía falta llenar algún requisito, pero la tercera vez entramos. Primero fue mucha emoción porque esto es de resistencia, de seguir intentando. Y fue un momento de felicidad y mucho orgullo, porque no lo habíamos logrado y sentíamos que nos faltaba algo.
El programa es muy exigente, pero es extremadamente disruptivo en la región porque no hay muchos programas que estén invirtiendo en climatech y deeptech, entonces tienen la vara bastante alta porque buscan más que nada calidad y una tecnología que se puede escalar en la región, les gusta mucho que exista una base científica y que al final se tenga un modelo de negocio.
Al querer ellos dar un valor, están buscando lo mejor dentro de la región, si ponen la vara bien alta, si conjugan muchas preguntas y muchos temas para que uno pueda clasificar.
¿A qué le atribuyes que por fin se decidiera acelerar a Nina Energy?
La perseverancia, ya que terminaron siendo testigos de los avances, que no nos quedamos estáticos y que continuamos en movimiento. A pesar de las primeras negativas, creo que se dieron cuenta de eso, de que estábamos perseverando y en cada aplicación que hacíamos para obtener el capital veían un avance, una mejora.
¿Qué es lo que más han logrado aprovechar del programa Geodesic promovido por Acelera Latam?
La estrategia. En mi caso, me enseñaron mucho a ser muy estratégico en cada acción en cuanto al levantamiento de capital. Antes de ellos, yo tenía una estrategia poco holística, pero ellos tienen una visión mucho más grande y una buena forma de hacerlo.
¿Qué experiencia puedes contar del programa Geodesic?
Que no es solamente ingresar al programa, es poder cumplir con una ruta que tienen de entrenamiento y de clases. A la par, seguir trabajando con hitos que se tienen que cumplir en la empresa y luego se juntan las dos cosas, terminar su programa y cumplir con los hitos, ahí es cuando se da la inversión.
¿Cuál será el destino que le darán a esta inversión/ronda?
Estamos incrementando el equipo, y estamos con una expansión comercial con diferentes países de Sudamérica. En este momento con Colombia y Chile. En Colombia, estamos con una empresa que desarrolla proyectos de remoción de carbono, nos estamos subiendo en sus hombros prácticamente para entrar. Y en Chile, a través de AceleraLatam que nos están presentando su red de contactos.
¿No van a explorar en otros países de Latam?
Sí, puedo ser infidente, yo sigo buscando un aliado en México, porque es un país agrícola. Habría muchas cosas que hacer en México, pero es muy grande y si no vamos armados puede que nos choquemos. Pero sí, tan pronto tengamos un aliado iríamos volando. Y hasta que lo logre no me voy a rendir.
Acelera Latam nuevamente abre una ronda de aceleración para otras startups con su programa Geodesic ¿recomiendas el programa?
Lo recomiendo, sí. Ellos dan guía, enseñan, proporcionan una red de contactos y acompañamiento por cuatro meses muy intensos, pero hay mucho que queda en la espalda del fundador.
Y no solo con ellos, sino con cualquier programa de aceleración es así. Y nosotros hemos tenido la suerte de estar en programas de aceleración en Chile, la mayor cantidad en Europa y todos tienen este mismo esquema de trabajo, pueden ayudar, dar esquemas, herramientas, clases; pero si el fundador no se mueve, no pasa nada.
El camino de Nina Energy muestra que insistir con estrategia y convicción abre puertas. No se trata de cuántas veces lo intentas, sino de cuánto creces en el intento.