La marca de zapatillas y ropa deportiva Nike se lució en el ya pasado Super Bowl LIX, al poner a las mujeres en primer plano.
En el mundo de los deportes masculinizados, la idea que se tiene es que las mujeres no somos capaces de dominar un balón, no podemos encestar o no podemos batir un récord cuando se trata de practicar el mismo deporte que los hombres.
No, es la palabra que siempre escuchan las deportistas a quienes siempre les están diciendo que es lo que pueden o no hacer, cómo deben comportarse o quienes tienen que ser.
Y aunque la marca Nike se ha caracterizado por ser inclusiva, nunca había sido tan directa con una campaña para empoderar mujeres, en este caso deportistas, sin importar si son o no de alto nivel.
Pero en sociedades como las nuestras de Latinoamérica, la lucha es el doble de esfuerzo, las mujeres pelean a codazos para que les permitan demostrar que son buenas en los deportes que se consideran exclusivos para los hombres.
Guatemala por ejemplo, tiene una selección de fútbol femenina a la que se le critica siempre, pero pocos saben que tras bambalinas ellas son objeto de marginación, les dan las peores canchas de futbol para practicar, los peores espacios para concentrarse o para viajar a un partido, y todo porque las mujeres que juegan futbol no llenan estadios.
Cuando Adriana Ruano Oliva la guatemalteca que estableció un récord al ganar la prueba de tiro femenino en los juegos de París, 2024 y ganó la medalla de oro, fue objeto de memes y chistes, porque en la mentalidad de muchos guatemaltecos es impensable que una mujer pueda usar un arma.
El anuncio de Nike para la Super Bowl empodera a aquellas atletas que, por comparación no pueden tener los mismos valores de sacrificio, esfuerzo o mentalidad que los hombres, porque nosotras las mujeres tenemos otras funciones que históricamente tenemos que cumplir, lo que crea una desventaja a la hora de participar en un deporte similar al que los hombres practican.
Alzar la voz, presumir sus logros o hacer reivindicaciones está vedado para las mujeres deportistas. Y por supuesto batir récords es impensable en la estructura patriarcal.
La atinada campaña ‘So Win’ se transmitió por primera vez el 9 de febrero durante el Super Bowl, después que Nike no había vuelto a participar desde 1998. Y lo hizo en blanco y negro, sin medias tintas. Como debe ser, demostrando que las mujeres pueden ser mejor que los hombres a la hora de batir records
Pero más que un anuncio, la campaña representa una alegoría de la lucha feminista por el derecho a decidir, y aplaudo a su creadora Wieden+Kennedy Portland y la directora de publicidad Kim Gehrig porque lo hicieron perfecto.
Jordán Chiles, ganadora de medallas olímpicas para los Estados Unidos, no lo pudo decir mejor: «No esperes a que te hagan caso: reclama la atención que mereces. Te esfuerzas, te preparas y, cuando llega el momento, lo abordas«.
Es por eso que aplaudo ‘So Win’, porque es un himno al empoderamiento femenino y Nike empodera mujeres mundialmente para que cumplan sus sueños deportivos y desafíen los estereotipos de género.
Así que no reclames, no discutas, no grites a los oídos sordos, mejor solo haz lo que tengas que hacer y gana.