Para Mohammad Yusuf Amdani Bai, el más grande millonario de Honduras y uno de los hombres más poderosos de Centroamérica, el nearshoring es una oportunidad única para México, sobre todo en educación, tecnología y aprendizaje.
En una reciente entrevista, el presidente del conglomerado GK Global, afirmó que este fenómeno “comienza y termina” en el país, puesto que la preferencia por conocimiento de las asiáticas es siempre México.
A Amdani Bai le llevó 30 años volverse el empresario más adinerado de Honduras, un país al que llegó desde su natal Pakistán, para sumar al tradicional negocio textil de su familia.
Después creció en bienes raíces a través de parques industriales, agricultura, tecnología y hotelería. Desde 1999 empezó una plantación de aceite de palma en Campeche, una de sus divisiones más importantes, con las que según algunos medios hondureños su fortuna se elevó a más de 5 mil 500 millones de dólares.
Es columnista de Forbes, el sello editorial con el que acaba de presentar su primer libro, Mundo de oportunidades (World of opportunity), en el que también presenta su faceta de filántropo y educador.
¿Cuál es la oportunidad real de aprovechar el nearshoring?
«Para mí, los próximos cinco años son una época muy probablemente única en la historia de México y un poco de Centroamérica. Para las empresas que vienen de Asia, el nearshoring empieza y termina en México. A ellos Centroamérica ni les pinta. Eso le da a México una gran oportunidad».
– Sabiendo que están en Campeche, ¿piensan expandirse a otras regiones del país?
– Si, ahora estamos viendo Tabasco, Durango o Aguascalientes como próximos sitios para desarrollar algunos proyectos.
– El gobierno mexicano está desarrollando la zona del Istmo, ¿les interesa la zona?
«Hemos analizado, todavía no hemos visto al gobierno federal para hablar sobre eso, pero una de las razones de considerar Tabasco es la cercanía con el Interoceánico, que está muy cerca y hasta desarrollada en el estado, entonces hasta puede ser el futuro de alguno de estos parques. El Interoceánico puede ser el destino de alguno de los parques».
– El gobierno aún tiene disponibles cinco licitaciones, ¿han considerado participar en alguna de ellas?
– Estamos analizándolo.
– ¿Pensarían en alguna oportunidad de negocio, más allá de la inmobiliaria para México?
«Sí, porque agrícola solo tenemos allá en México; ahí sí tenemos la idea de seguir creciendo y verticalizando toda la industria de palma. Tenemos la idea de invertir entre 15 y 20 millones de dólares en la parte agrícola cada año».
– ¿Y en parques industriales?
– No tengo cifra porque todavía estamos en análisis de proyectos.
– ¿Cómo pretende entrar GK en la tendencia del nearshoring?
«Pensamos en nuestro modelo de inmuebles, que es completamente distrital, donde partimos de que el (área) es solo uno de los componentes, porque nosotros no solo alquilamos una bodega o edificio, sino que rentamos una planta completamente lista para operarse».
El empresario agregó:
«Esto significa la parte electromecánica, instalaciones. Apoyamos al cliente por completo en su mantenimiento, mano de obra y si se requiere entrenamiento especial, traemos de fuera a cualquier especialista para preparar a los trabajadores; después proveemos todos los servicios de energía, agua, tratamos aguas residuales y logística, y todo lo que necesita para que primero pueda producir eficientemente y hacerlo a costos competitivos».
– Si México es el país que más está generando la oportunidad del nearshoring, y ustedes están en Campeche, ¿redoblarán sus esfuerzos para crecer en esta región?
– Básicamente estamos viendo dos divisiones de nuestro negocio, uno es el de desarrollos sustentables integrales, y el otro es tecnología, donde tenemos smart city, como concepto único de modelo de negocio.
– ¿Apostar por la educación tecnológica hará que disminuya la migración y esto propiciará un mejor arraigo a su hogar en Centroamérica?
– Absolutamente. Nosotros hemos hecho un estudio donde vimos que por cada puesto de trabajo que generamos nosotros evitamos que 11 personas migren.
– Usted se puede imaginar que cada vez que está generando un trabajo formal en el sur de México o en ciudades fronterizas, o en cualquier parte de Centroamérica o más adelante, tienen una relación directa a la emigración?
– Hasta ahora, en los últimos años, estamos hablando de hacer inversiones en el sur de México y en Centroamérica, ¿verdad? Pero yo siempre pienso que si usted nació en un pueblo y no tiene oportunidades, ¿qué va a hacer? Va a moverse a la ciudad y si no, tiene la oportunidad va a moverse a otro país. Usted no va a morir, usted tiene que buscar para luchar y ver cómo sobrevivir, ¿no?
– Entonces para la migración no hay forma de ponerle fronteras, paredes o controles. Hasta que no generemos empleos y oportunidades se tendrá un impacto directo en la migración y con ello en comunidades.
Publicado el 11-09-23 en Milenio.